En este post queremos puntualizar y resolver una duda que surge en los grupos de preparacion al parto y sobre todo de recuperación posparto como es la utilización después del alumbramiento del cinturón posparto o cinturón pélvico en el posparto.

El cinturón pélvico es una cincha de material elástico y regulable que se coloca o bien en los meses de embarazo cuando existen problemas de dolor sacroiliaco o diástasis de la sínfisis púbica o bien en el posparto inmediato una vez que la madre se pone de pie tras el parto, con el fin de estabilizar las articulaciones pélvicas involucradas en él, y para ayudar al periné en la recuperación del suelo pélvico, en este último caso, después del parto, dicho cinturón rodea la pelvis de la mujer justo por debajo de las espinas iliacas anterosuperiores y hasta que pasan aproximadamente 40 días, durante todo el día, excepto cuando se esta en decúbito, siendo especialmente aconsejable cuando se va a caminar.

Hay que diferenciarlos de las fajas abdominales que se venden con el objetivo de “recuperar la figura” o también de “sentirse más seguras y protegidas”, son las fajas abdominales posparto conocidas con diversos nombre como “compression bandages”, “pospartum girdle”, “corset girdle”, “tight belly bands”, “to hook-and-eye corsets”, “pull-up girdles”…, y en las que su colocación en casi todos los casos se describe por encima de la pelvis, hecho que todo experto en fisioterapia uroginecológica y obstétrica desaconseja, el motivo lo encontramos al analizar la anatomía y la fisiología de la región ya que es lógico pensar que si se coloca a nivel del abdomen, además de no tener efecto beneficioso sobre este, inducen un aumento de la presión abdominal, que escapa por dos regiones anatómicas, una es el diafragma elevándolo y otro el suelo pélvico, descendiéndolo, aunque el aumento de presión en la colocación sea ascendente (lo que denominan “pull-up”) y aunque tengan cremallera ascendente. No se “vuelve todo a su sitio” como se describe en algún texto, si no que se empuja a lugares donde se ofrece menos resistencia.

Cuando la cincha se recomienda en el embarazo por sacroileitis o hipermovilidad de la sínfisis del pubis o incluso micción frecuente o incontinencia ha de colocarse anterior a la sínfisis por debajo del abdomen. En este sentido hemos encontrado  estudios donde si se han valorado la colocación de cinchas en mujeres embarazadas (1) encontrándose una disminución de la movilidad de las articulaciones sacroilacas en mayor medida si el cinturón ha sido colocado justo por debajo de las EIAS con respecto a una colocación por encima de la sínfisis del pubis.

En el caso de que su utilización sea en el posparto la correcto es colocarla por debajo de las espinas iliacas anterosuperiores quedando en función de la anchura del cinturón y de las dimensiones de la mujer, más o menos cerca de los trocánteres mayores y de la sínfisis del pubis o incluso solapada a estos.

2 cinturon posparto recuperacion suelo pelvico valladolid

Primer tiempo colocación cinturón pélvico posparto, inmediatamente por debajo de las espinas iliacas anterosuperiores 

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Segundo tiempo, ajuste de las cinchas de velcro laterales.

En mujeres sanas y en posición de decubito prono, una colocación por debajo de las espinas iliacas anterosuperiores es más efectiva para la estabilización de la articulación sacroiliaca que la colocación justo al nivel de la sínfisis (2), resultados que también se repitieron en mujeres embarazadas (3), aunque si se trata de fuerzas de compresión externas manuales, diferentes al cinturón el efecto no es tan claro (4).

La tensión ha de ser una tensión cómoda que permita un movimiento y una deambulación fluida porque atendiendo a los resultados del estudio anterior no se encontró correlación entre fuerza de presión del cinturón y disminución de la laxitud de la articulación sacroiliaca.

4 cinturon posparto recuperacion suelo pelvico valladolid

Tercer tiempo de la colocación, en el que se acomoda el cinturón para que permita caminar y moverse sin dificultad

Todo ello lo podemos ver en el siguiente vídeo

Los efectos que se tienen al realizarlo a este nivel son:

• Las líneas de fuerza centrípetas que induce el cinturón se realizan en el plano horizontal que pasa por los isquiones o ligeramente por encima de estos, hecho que provoca que además de bloquear la articulación sacroiliaca sobre todo en su polo inferior, compacta la sínfisis del pubis.

• Ayudan a la acción de fuerza de cierre del iliaco llevada a cabo por la musculatura abdominal –recto anterior y oblicuos- descrita por Snijders y colaboradores (5)

• Cierra por tanto el estrecho inferior ayudando a la contención de los músculos del suelo pélvico, por eso es importante utilizarlo desde fases tempranas haya sido parto natural o por cesárea. Este ultimo efecto cuando es preguntado a las mujeres que lo utilizan es claro y provocan un sensación subjetiva de cierre del periné, aunque después de hacer una búsqueda bibliográfica en Pubmed, PEDro, Cochrane y Sciencedirect utilizando las palabras clave “urinary incontinence and pospartum belt”, “urinary incontinence and nonelastic sacroiliac belt” “urinary incontinence pospartum strap” “urinary incontinence and pospartum bandage”, no hemos encontrado estudios que evalúen los efectos beneficiosos sobre el tratamiento y prevención de la incontinencia urinaria de ninguna contención abdominal ni pélvica en el posparto.

No hay por lo tanto estudios que valoren si existe efecto del cinturón colocado después del parto sobre la función del suelo pélvico, aunque de algunos si que podemos sacar conclusiones que nos lleven a pensar que su utilización disminuirán las probabilidades de que exista una disfunción del suelo pélvico, uno de ellos (6) establece que la colocación de un cinturón pélvico por debajo justo de las EIAS en mujeres sanas disminuye la actividad muscular del recto anterior y oblicuos cuando se solicita un mantenimiento del equilibrio en una superficie inestable y otro (7) cuando se camina en cinta con elevación de la pierna recta, hecho que extrapolandolo a mujeres que han dado a luz recientemente podríamos decir que dicho cinturón sustituiria parte de la actividad de estos músculos disminuyendo la presión abdominal y liberando el periné de fuerzas en una dirección lesiva para él.

Si tenemos en cuenta la descripción de el cinturón physiomat ® de Bernadette de gasquet (La CEINTURE de maintien physiomat). Lo ideal es que sea regulable y ajustable en anchura mediante velcro®

En ningún momento esto garantiza la recuperación del suelo pélvico si ha existido disfunción, lo que si hace es por un lado evitar que se produzca, y en el caso de que se haya producido es darnos tiempo para que se vaya tonificando la musculatura del periné, el transverso del abdomen (prioritario antes que el recto anterior y oblicuos) estabilizador natural de la articulación sacroiliaca (8), se restablezcan las fuerzas descendentes provocadas por el cambio de las relaciones de las vísceras abdominales y se vuelva a los niveles normales de relaxina y por tanto de distensión ligamentaria y articular, hechos estos últimos que pueden ser acelerados y ayudados por una fisioterapia de recuperación del suelo pélvico precoz.

Se ha utilizado en la realización de diferentes estudios de recuperación posparto, como tratamiento fijo dentro de todos los grupos de estudio (9). Y es altamente recomendable su utilización en el caso de existencia de dolor pélvico en el preparto, ya que según Damen L y colaboradores (10) el hecho de haber sufrido dolor pélvico durante el embarazo, es un valor predictivo de mantenerlo en el posparto.

Como conclusión diremos que desde nuestro Centro recomendamos utilizar el cinturón en el embarazo solo cuando existen problemas de hipermovilidad de articulaciones sacroliacas o de sínfisis púbica, y recomendamos su uso en el posparto inmediato (antes de poner el pie en el suelo después del parto) en todas las ocasiones  y como ayuda a la recuperación tras el alumbramiento tanto del suelo pélvico como de la funcionalidad pélvica.

(1) Nilsson-Wikmar L1, Holm K, Oijerstedt R, Harms-Ringdahl K. Effect of three different physical therapy treatments on pain and activity in pregnant women with pelvic girdle pain: a randomized clinical trial with 3, 6, and 12 months follow-up postpartum. Spine (Phila Pa 1976). 2005 Apr 15;30(8):850-6.

(2) Damen L1, Spoor CW, Snijders CJ, Stam HJ. Does a pelvic belt influence sacroiliac joint laxity? Clin Biomech (Bristol, Avon). 2002 Aug;17(7):495-8.

(3) Mens JM1, Damen L, Snijders CJ, Stam HJ. The mechanical effect of a pelvic belt in patients with pregnancy-related pelvic pain. Clin Biomech (Bristol, Avon). 2006 Feb;21(2):122-7. Epub 2005 Oct 7.

(4) Jan M.A. Mens, Léonie Damen, Chris J. Snijders, Henk J. Stam . The mechanical effect of a pelvic belt in patients with pregnancy-related pelvic pain Original Research Article Clinical Biomechanics, Volume 21, Issue 2, February 2006, Pages 122-127

(5) 5. Snijders CJ, Vleeming A, Stoeckart R.: Transfer of lumbosacral load to iliac bones and legs. Part 1: biomechanics of self-bracing of the sacroiliac joints and its significance for treatment and exercise. Clin Biomech (Bristol, Avon), 1993, 8: 285–294.

(6) Kim YR1, Kim JW, An DH, Yoo WG, Oh JS. Effects of a Pelvic Belt on the EMG Activity of the Abdominal Muscles during a Single-leg Hold in the Hook-lying Position on a Round Foam Roll. J Phys Ther Sci.2013 Jul;25(7):793-5. doi: 10.1589/jpts.25.793. Epub 2013 Aug 20.

(7) Hu H1, Meijer OG, van Dieën JH, Hodges PW, Bruijn SM, Strijers RL, Nanayakkara PW, van Royen BJ, Wu W, Xia C.Muscle activity during the active straight leg raise (ASLR), and the effects of a pelvic belt on the ASLR and on treadmill walking. J Biomech. 2010 Feb 10;43(3):532-9. doi: 10.1016/j.jbiomech.2009.09.035.Epub 2009 Nov

(8) Richardson CA1, Snijders CJ, Hides JA, Damen L, Pas MS, Storm J.The relation between the transversus abdominis muscles, sacroiliac joint mechanics, and low back pain. Spine (Phila Pa 1976). 2002 Feb 15;27(4):399-405.

(9) Ashokan Arumugama, Stephan Milosavljevica, Stephanie Woodleyb, Gisela Solea, Effects of external pelvic compression on form closure, force closure, and neuromotor control of the lumbopelvic spine – Asystematic review

(10) Damen L1, Buyruk HM, Güler-Uysal F, Lotgering FK, Snijders CJ, Stam HJ. The prognostic value of asymmetric laxity of the sacroiliac joints in pregnancy-related pelvic pain. Spine (Phila Pa 1976). 2002 Dec 15;27(24):2820-4.